El ministro de Salud Pública, Bautista Rojas Gómez, reveló en un encuentro con periodistas que un niño dominicano de doce años fue detectado con la enfermedad en el municipio Santo Domingo Este, al igual que una niña haitiana de siete años, residente en Santiago (norte), segunda ciudad en importancia del país.
El funcionario aseguró que desde ayer iniciaron las investigaciones en los lugares donde residen los niños afectados para determinar posibles focos de infección.
El niño se encuentra ingresado en el hospital materno-infantil San Lorenzo de Los Mina, y la niña en el Arturo Grullón de Santiago.
Rojas Gómez destacó que los dos menores se encuentran en condiciones estables.
"Se trata de una niña haitiana residente en Villa González, quien se encuentra ingresada y está en perfectas condiciones a la mañana de hoy, mientras que el otro paciente es un niño de doce años que también está en buenas condiciones", explicó el ministro.
República Dominicana ha dispuesto un programa con el propósito de reducir los efectos del cólera en el país, que en el vecino Haití ha causado ya más de 1.600 muertos y decenas de miles de afectados.
La frontera de más de 400 kilómetros que divide a los dos países ha sido reforzada con la presencia de miles de soldados, para evitar la entrada al territorio dominicano de ciudadanos haitianos, indocumentados o no, que presenten síntomas de la bacteria.
El funcionario aseguró que desde ayer iniciaron las investigaciones en los lugares donde residen los niños afectados para determinar posibles focos de infección.
El niño se encuentra ingresado en el hospital materno-infantil San Lorenzo de Los Mina, y la niña en el Arturo Grullón de Santiago.
Rojas Gómez destacó que los dos menores se encuentran en condiciones estables.
"Se trata de una niña haitiana residente en Villa González, quien se encuentra ingresada y está en perfectas condiciones a la mañana de hoy, mientras que el otro paciente es un niño de doce años que también está en buenas condiciones", explicó el ministro.
República Dominicana ha dispuesto un programa con el propósito de reducir los efectos del cólera en el país, que en el vecino Haití ha causado ya más de 1.600 muertos y decenas de miles de afectados.
La frontera de más de 400 kilómetros que divide a los dos países ha sido reforzada con la presencia de miles de soldados, para evitar la entrada al territorio dominicano de ciudadanos haitianos, indocumentados o no, que presenten síntomas de la bacteria.
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