jueves, 27 de noviembre de 2008

Se le incrustaron las llaves hasta el cerebro y no le paso nada


Como un milagro califica la familia el caso del niño Nicholas Holderman, de 20 meses, quien se enterró unas llaves en su ojo derecho y no perdió la vista ni sufrió daños cerebrales.
Sigue Leyendo ‘Se le incrustaron las llaves hasta el cerebro y no le paso nada’