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NUEVA YORK._ En una megapólis, caracterizada por frecuentes explosiones, escapes de gas, voraces incendios, intentos de suicidios, olores “raros”, humaredas, accidentes en construcciones, choques diarios de docenas de vehículos, derrumbes y otras amenazas, escenas propias de los socorristas, especialidad de los bomberos, 25 cuarteles en los que estos operan, corren el riesgo de ser cerrados por el municipio en el 2010.
La medida, sería irreversible, si continúan los recortes presupuestarios de la ciudad, cuyo déficit se estima en más de $5 billones de dólares. Para quienes recomiendan el cierre de las estaciones de bomberos, cada clausura, representaría un ahorro de $$1 millón de dólares.
También se estaría contemplando reducir en cada cuartel de 5 a 4 miembros. Durante el 2008, el alcalde Michael Bloomberg a quien las encuestas le dan el 53% en la intención del voto para las elecciones del próximo 4 de noviembre, propuso el cierre de 16 cuarteles.
Cuatro de ese total fueron cerradas recientemente en Staten Island, El Bronx, Manhattan y Brooklyn y otras 12 estaciones en áreas no identificadas. Pero luego de muchas protestas de los contribuyentes, el alcalde y el Consejo Municipal, acordaron balancear un presupuesto que evitó el cierre de otos muchos cuarteles.
En el 2003, Bloomberg también cerró 16 estaciones. Los bomberos de Nueva York, además de los fuegos, están entrenados para responder a una multiplicidad de emergencias y tienen el control del servicio paramédico en las ambulancias y los hospitales de la ciudad.
Autor: Miguel Cruz Tejada
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