jueves, 8 de octubre de 2009

Hombre mata a balazos a su ex pareja y se suicida

EL HIJO DE AMBOS, DE TRES AÑOS, ES QUIEN AVISÓ DEL HECHO A LA ABUELA
Los cadáveres de Carli Rosario Rodríguez, de 22 años, y de Maireni García González, de 32.
Santo Domingo.- “Mi papi mató a mi mami”, le dijo un niño de tres años a su abuela, mientras lloraba. Fue así como la señora madre de la víctima supo la noticia de que su hija había sido impactada de varios balazos provocados por su ex marido, quien minutos después se suicidó.
El hecho ocurrió en el apartamento donde residía la pareja, ubicado en el edificio número 84, de la avenida V Centenario, en el sector Villa Juana de la capital.
Carli Rosario Rodríguez, de 22 años, murió a consecuencia de los disparos en el tórax y el cráneo, ocasionados por su ex compañero sentimental Maireni García González, de 32, quien tras cometer el hecho también se disparó a la cabeza.
Según la narración hecha por la madre de la joven, Miguelita Rodríguez, el niño procreado por la pareja al parecer presenció los hechos. Precisó que en la tarde fue a visitar a su hija, preocupada, y al abrir la puerta el niño le dio la mala nueva de la tragedia.
Al hablar, nerviosa y conmovida, dijo que hacía quince días que ambos estaban separados y que su hija estaba viviendo con ella en su casa, pero la noche del martes él fue a buscarla.
“Ya tenía la intención de matarla. Él fue a buscarla para matarla, él tenía su plan por dentro”, dijo la mujer, quien intentaba calmar a su otra hija Tiara, nerviosa y enojada por el asesinato de que fue víctima su hermana.
Sobre el caso, la Policía precisó que el hecho de sangre ocurrió alrededor de las 3:00 de la tarde, y que de inmediato los agentes del Departamento de Investigaciones de Homicidios  se trasladaron al lugar para investigar y determinar las razones que llevaron a García González a cometer el crimen.
El informe preliminar refiere que el arma homicida no fue encontrada en la escena del crimen, pero que los casquillos fueron recolectados encima de la cama, razón por la cual los investigadores policiales profundizan las pesquisas.
A las cuatro de la tarde los cadáveres yacían en la habitación, en medio de un charco de sangre, mientras agentes de la Policía Científica y equipos de Patología Forense hacían esfuerzos para recrear la escena del doble suceso y analizaban los motivos que tuvo el hombre para matar a la mujer y luego quitarse la vida.
Varios amigos del joven homicida-suicida se extrañaron de su comportamiento, al describirlo como alguien tranquilo y que nunca había dado connotaciones de que podía tomar una decisión de tal magnitud.

LISTIN DIARIO